La historia del pop-rock podría simbolizarse con un reloj de arena. En la parte de arriba lo que aún ha de ocurrir; abajo lo que ha sucedido. El cuello por el que cae la arena, grano a grano, mide el paso del tiempo. Pero no hay más que dar la vuelta al reloj para que lo que antes estaba abajo vuelva arriba, para que todo el pasado vuelva a ser tiempo no consumido: futuro. Y cuando hayamos hecho esa maniobra varias veces, entenderemos que la arena que circula de un lado a otro no pertenece a ninguna época. Es solo materia para medir el tiempo.
Este texto lo escribe Nando Cruz en el número de marzo de Rockdelux y me parece tan chulo que merece ser compartido. Lo utiliza para introducir un artículo acerca de The Jesus and Mary Chain, grupo tremendo y eterno que triunfó hace un par de décadas y del que un servidor es fiel devoto. Pero como me apetece un poco más de marcha, dentro de la atemporalidad de la que habla el periodista, he escogido a Rinôçerôse, electrónicos franceses que suenan a los 80´s, 90´s y actuales sin perder el estilo -siendo ellos unos macarras de tomo y lomo-. «La Guitaristic House Organisation» es el nombre del single, perteneciente a su primer álbum «Installation sonore» de 1999. Aunque aún siguen en activo, hace casi una década que no editan nada relevante. Eso sí, en su día sus dos primeros elepés fueron la leche…
Música y mandarinas 
A ver, Corne, que llevo semanas sin hacerte ni caso (perdón). Así que voy diciendo cosas:
Cuando escucho o leo el nombre de The Jesus and Mary Chain no puedo dejar de acordarme del primer lugar donde les escuché: la BSO de El Cuervo. Allí tocaban el Snakedriver que, siendo chulo, a mi gusto no tiene ni punto de comparación con otras canciones de la BSO de grandes grupos como The Cure -Burn- (y es que es difícil que los de Robert Smith hagan algo que no me parezca interesante), Stone Temple Pilots -Big Empty- (un sonido muy 90´s), Nine Inch Nails -Dead Souls- (la mezcla electrónica-batería-riffs de guitarra me parece súper atractivo) y, como no, Rage Against the Machine -Darkness- (esta canción es soberbia) y Pantera -The Badge- (por estos últimos he tenido siempre cierta idolatría después del Vulgar Display of Power). Hay una última canción (After the Flesh) que me mola especialmente, muy electro-rockanrollera que es de unos tíos que no sé quiénes son: My Life With The Thrill Kill Kult.
Por otro lado, espero tu opinión sobre Gotye. Le he descubierto con una canción/video que me ha fascinado: Somebody that I used to know, y he empezado a escuchar algo más. Interesante.
¿Algo más? ¡Ah, sí! Este domingo voy a ver a James Morrison después de dos intentos fallidos los últimos cuatro años (falló en Rock in Rio 2008 -lo cambiaron por Stereophonics… igualito…; y falló en la Riviera en 2010 por una infección de garganta). Cruzo los dedos…
Pues esto es todo. Buen finde y un abrazo!!
El video de Gotye es terrible pero la canción está chula. No lo había escuchado nunca.
Sobre la banda sonora de El Cuervo poco que añadir. Para mí también fue la primera vez que escuché a los Jesus y algún grupo más de los que citas. Especialmente buenos son Stone Temple Pilots, puros noventa. ¡Qué maravilla! Habrá que dedicarles un post en breve. Y lo de Pantera no me lo esperaba, pero me alegro. Mi adolescencia no habría sido lo mismo sin The Great Southern Trendkill (http://www.youtube.com/watch?v=Y4pOIndfTzI) y el Vulgar display of Power (y su portada, qué malotes éramos, jaja).
A mí en concreto me descolocaron el Vulgar y el Far Beyond Driven (Cowboys from Hell me pilló aún un pelín pequño). Y sobre The Great Southern Trendkill, al comprarlo, me flipó el grito inicial: «¡Joder, esto es Pantera¡», espeté.